En los últimos tiempos, el reciclaje se ha convertido en uno de los principios más arraigados entre los habitantes de San Antonio, ya que contribuye no sólo a la correcta separación de residuos domésticos, sino que, también a la conservación del medio ambiente.
Es en esta línea, con la finalidad de brindar apoyo a la Corporación Oncológica Infantil, el municipio, a través de la Dirección de Medio Ambiente, Aseo y Ornato (Dimao), estableció el primer punto de recolección de tapas de plástico en el bandejón central de Barros Luco, el que tiene como propósito recaudar fondos para los niños y familias de bajos ingresos que están recibiendo tratamiento contra el cáncer en los hospitales Luis Calvo Mackenna y San Juan de Dios.
El Administrador Municipal, Francisco Valenzuela, expresó su entusiasmo por la inauguración de una iniciativa que promueve la ecología y la solidaridad, destacando los dos objetivos principales: el cuidado del medio ambiente a través de la recolección de tapas plásticas y el apoyo a los niños con cáncer.
“Estamos realmente orgullosos de inaugurar una obra única que evoca dos propósitos importantes como son el cuidado del medio ambiente y el apoyo a los niños con cáncer. Agradecemos los aportes de la empresa privada y el esfuerzo de la comunidad estudiantil y también invitamos a la comunidad a cuidar esta infraestructura y a traer sus tapas plásticas para cooperar con la campaña”, señaló Valenzuela.
La obra fue creada por Gustavo Castro Jeria, un profesor y escultor de Llolleo, en colaboración con los estudiantes de la especialidad de estructuras metálicas del Liceo Juan Dante Parraguez. Según su autor, “esta pieza artística evoca un sentido metafórico, inspirándose en la espuma que acaricia las orillas de nuestras costas. Simboliza el oxígeno, elemento esencial para la vida, y refleja nuestra conexión intrínseca con el mar”.
En el transcurso de la ceremonia, se hizo un reconocimiento especial al empresario local, César Javer Manzur, quien realizó una contribución significativa a este proyecto, proporcionando los materiales de construcción necesarios para la instalación de la obra.
Esta campaña surge para promover el reciclaje de plásticos, los cuales contaminan y tardan al menos 500 años en degradarse. Asimismo, esta iniciativa está diseñada para recolectar todo tipo de tapas plásticas: de envases de bebidas, jugos, champús, detergentes, remedios, entre otros. Es importante que las tapas se depositen limpias.
Por su parte, María José Gallardo, docente de la Escuela Cerro Placilla, una institución que participa activamente en la campaña, señaló que “como establecimiento educacional, estamos muy contentos de poder participar en las diversas actividades que desarrolla Dimao. Como escuela, estamos siempre comprometidos con el desarrollo de una cultura medioambiental y, por lo tanto, nos complace participar en esta iniciativa”.
Por último, la obra estará ubicada en la intersección de la avenida Barros Luco con Carlos Demarchi, justo frente al estadio Municipal Olegario Henríquez Escalante. Este proyecto no es sólo un hito arquitectónico, sino también un símbolo de una gran causa: apoyar a los niños y niñas que luchan contra el cáncer.