Definitivo: el “noticioso” Ombú de la Plaza de Llolleo cayó a tierra, prácticamente muerto tras un breve historial de sufrimientos e intentos por salvarlo. Tal vez por maltrato de los vándalos nunca ubicados o por no adaptarse al lugar de su antecesor que dio fama a Llolleo como balneario sanador de males al corazón, al amanecer de este miércoles 02 de Abril el ejemplar plantado en Diciembre del 2013 fue encontrado tumbado y partido en dos. El doloroso hallazgo lo hizo personal a cargo del aseo y mantención de la Plaza, dando cuenta inmediata a la Dirección de Medio Ambiente, Aseo y Ornato de la Municipalidad de San Antonio. “La alegría que creo experimentó la mayoría en diciembre pasado al recibir ese nuevo ejemplar del valioso árbol y la confianza que la gente cumpliría su promesa de cuidarlo se perdieron en Febrero pasado cuando desconocidos le causaron mucho daño, le pegaron, le quebraron ramas y otros golpes hasta que un día amaneció tumbado”, recordó Ernig Muñoz Farías, Directora de esa unidad municipal. Agregó que se trató de salvarlo y la propia especie parece haber colaborado pues “en sus brotes nuevos muestra que quería vivir, que deseaba salir adelante”. Luego la personera informó que nuevamente se tratará de salvarlo, pero ahora llevándolo a un recinto municipal aislado donde plantarán los dos cuerpos en que quedó dividido el ombú, como también en el espacio que deja vacío se intentará plantar ejemplares más nuevos que no llamen la atención de los vándalos y tengan más posibilidades de adaptarse a la Plaza. El retiro y traslado se hizo de inmediato. Por su parte Angel Bastías, técnico de esa Dirección municipal, expresó que lo sucedido “es el desenlace del mal trato tenido por esta especie desde que fue plantada”. Añadió que el ombú “es una planta que requiere tenerle cariño y aquí no se dio el caso; es similar al papayo, tiene más fibra que madera en su tronco y sumándose a los daños sufridos su propio peso lo quebró. Ambos representantes del municipio coincidieron sí en que se necesitan cámaras de vigilancia en la Plaza de Llolleo, pues aparte de lo sufrido por el ombú ha habido atentados a otros de sus elementos componentes como las Jardineras con petunias volcadas el reciente fin de semana. Angel Bastías se mostró optimista en que un nuevo ejemplar más joven se adapte al clima y terreno de la Plaza de Llolleo, pero resaltó que “aquí el problema es el vandalismo”.-